lunes, 14 de marzo de 2022

Si dijéramos la verdad


Imagen de Internet


¿Qué harías si encontraras un cuaderno con las palabras El proyecto de la autenticidad escritas en la cubierta, seguidas del siguiente texto escrito en la primera página?

«¿Conoces bien a las personas que viven cerca de ti? 
¿Y ellas a ti? ¿Sabes siquiera cómo se llaman tus vecinos? ¿Y si tuvieran un problema o hiciese días que no salieran de su casa, te enterarías?
Todos mentimos sobre nuestra vida. ¿Qué pasaría si, por una vez, compartiéramos la verdad? ¿Lo que te define, lo que hace que encaje todo lo demás? Y no por internet, sino con las personas de carne y  hueso que te rodean.
Tal vez nada. O puede que contar esa historia cambiase tu vida, o la de alguien a quien todavía no hubieras conocido.
Eso es lo que quiero averiguar».
 
Para a continuación seguir leyendo y encontrar las palabras de Julian Jessop, un señor de setenta y nueve años, viudo y que se siente tremendamente solo. 
Mi primera intención sería la de leer lo suficiente como para tener la información necesaria para devolver el cuaderno a su dueño. Y por supuesto, con tremenda introducción pensaría que todo lo que hay escrito es verdad.

Creo que este libro era la lectura que necesitaba en este momento. 
Las últimas novelas que he leído me han gustado mucho pero me han dejado un peso en el pecho y un poso de tristeza en el corazón. Esta historia está narrada de una forma ligera pero es muy interesante. No he sentido que haya grandes dramas por la forma en la que está contada, pero en ningún momento me ha parecido superficial, al contrario. Habla de adicciones, soledad, inseguridades, miedos, amistad y muchas cosas más.

Lo he pensado, y si llegara a mis manos un cuaderno en el que poder escribir mi verdad, aquella que no compartiría con las personas que me conocen pero que es lo que hace que encaje todo lo demás sería esta: estoy agotada mentalmente. Aunque cada día estoy más conforme con lo que hago y no hago, todo eso es después de barajar cien veces las mil posibilidades que se pasean por mi cabeza. 
Es una costumbre, un tic, una manía, un defecto de fábrica, me viene de serie. Incluso lo menos pensado y más espontáneo me doy cuenta de que ha sido producto de un análisis involuntario de actos y sus consecuencias.

Aquí podéis leer una entrevista a la autora del libro, Clare Pooley.
 

26 comentarios:

  1. Me parece interesante y me voy a hacer con él.

    "si llegara a mis manos un cuaderno en el que poder escribir mi verdad, aquella que no compartiría con las personas que me conocen pero que es lo que hace que encaje todo lo demás sería esta": Que me amo, que con los años he aprendido a amarme y he llegado un punto de mi vida en el que acepto mis defectos -que los hay y bastantes- y ensalzo mis virtudes, y que directamente al que no le guste paso de esa persona, y con viento fresco. Esta quizás sea mi mayor verdad, esa que no sueles ir diciendo porque te tachan de egocentrista, de sobrada y prepotente (y no saben cuánto se equivocan)

    Un beso y buen inicio de semana.

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    1. Pues me encanta tu verdad Prozac.
      ¿Sabes? Yo creo que quienes tachan a personas como tú de egocentristas o sobradas es porque tienen miedo. Asusta estar frente a alguien que se acepta y se quiere. ¿Por qué? Porque a los demás les gustaría ser también así y no pueden.

      Besos.

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  2. En este momento no creo que pudiera escribir mi verdad en un cuaderno. Un beso

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    1. Quizás es un poco lo que hacemos en el blog ¿no crees?

      Besos.

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  3. Escribir en una hoja en blanco lo que cada uno considera su verdad no es tan sencillo siempre y cuando hagamos eso, contar la verdad. Interesante propuesta. Un abrazo y muy feliz semana.

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    1. ¿Y cuántas verdades hay Campirela? Esa es otra, que lo que a mí me parece la verdad más cierta del mundo a otro le pueden parecer cuentos chinos.

      Besos.

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  4. Si tuviera que
    decir verdades
    a todo dios, me
    quedaba más solo
    que la una, a nadie
    le gusta que le
    mientan,pero cuando
    te sinceras, no te
    quiere nadie, con
    respecto a la vecindad
    más vale callarme,
    antes de despellejar
    a dos o tres.

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    1. Igual me estoy contradiciendo, pero es que creo que tampoco hay que sincerarse siempre. Y no es lo mismo que mentir, que quede claro. Pero hay ocasiones en las que la sinceridad puede esperar.

      Besos.

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    2. Yo no tengo espera ,
      a mi, o se me quiere,
      o se me tiene coraje ,
      no entiendo de terminos
      medios condicionantes.

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    3. Bueno, yo creo que a veces sí que hay un punto medio.
      Hay personas que no te caen ni bien ni mal, que son soportables.

      Besos.

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    4. Que son justo ,las
      que no conozco de nada,
      siento estar tan respondon,
      es que ando todavia algo alterado
      por un encontranazo con un
      gilipollas
      al que casi le rompo la cara .

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    5. Si te sirve para desahogarte puedes responder todo lo que quieras ;-)

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  5. Yo ya no doy a basto con tus recomendaciones. Estoy como en una tienda de golosinas y no sé por donde empezar primero porque todas me gustan. Me estaba rondando la idea de comprar tu recomendación asiática de la semana pasada y esta me resulta más cercana todavía. Sobre todo porque necesito evasión antes que tristeza.
    ¿Cuanto conocemos a las personas que nos rodean? Menos de lo que pensamos. Estoy escribiendo un minilibrito para regalárselo en Septiembre a mi hermana cuando cumpla años. Sus primeros años en relación a los míos hasta que se fue de casa. Hablando con mis padres he visto que desconozco historias de su vida, de la de mis padres y abuelos, de las personas más cercanas... Si desconocía tanto de ellos por no hacer las preguntas adecuadas... Imagínate a los vecinos o los conocidos con los que no he vivido. Todos somos extraños entre nosotros. Besos

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    1. Pues tengo otras tres recomendaciones (de momento) programadas, pero es cierto que de todas esta es la más agradable, la verdad.
      Yo no sé si llegaré a conocerme bien alguna vez, así que ya he asumido que tampoco conoceré a nadie con todas sus verdades. Y es que eso de la verdad... No sé, a veces prefiero no saberla. Muchas veces el más feliz es el más ignorante.

      Besos.

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  6. Hay puertas que conviene no abrir. Al menos, por ahora. Quizá cuando estemos preparados, si es que se está preparado para tal cosa.

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    1. Yo creo que para ciertas verdades nunca estaremos preparados.

      Besos.

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  7. La verdad es escurridiza y cambia como cambiamos nosotros.
    De todas formas yo creo que en cada texto que escribimos hay algo de verdad de cada uno y que es normal que intentemos encajar de alguna manera en nuestro entorno, aunque eso suponga no mostrar toda nuestra verdad.
    Aquí por escrito me parece un lío, pero en mi cabeza estaba tan claro... ;-)

    Besos.

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  8. me apunto ese libro. yo también pienso mucho ese tipo de cosas. en algunos aspectos uno no se conoce del todo a sí mismo, no digamos a otros.
    a mí también me pasa lo de tomar decisiones constantemente, sean poco importantes o mucho. al final acaba cansando, y cuando crees que te has equivocado te frustras...
    besos!!

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    1. Me entiendes perfectamente Chema y eso que no conoces toda mi verdad ¿eh? ;-)

      Besos.

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  9. Escribir siempre es una buena terapia y aunque no se pretenda es fácil que se cuele algo de nosotros, de nuestros miedos y nuestras limitaciones y que se refleje el dolor o la alegría. Lo de escribir "la verdad" no sé si es útil, uno a cada rato puede sentirse de una manera, digamos que un estado de ánimo no es una garantía. un saludo

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    1. Algo de nosotros tiene que haber en lo que escribimos, aunque sea el sueño o la ilusión de lo que no podemos hacer. De alguna forma tenemos que cumplir nuestras fantasías.
      Pienso lo mismo que tú con respecto a la «verdad». La mía no es la misma ahora que hace diez años.

      Besos.

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  10. Supongo que contar lo que te pasa ayuda mentalmente a liberar parte de la carga. Seguro que sí. Me parece interesante la propuesta de este libro, me has intrigado. Lo buscaré.
    Besos

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    1. Unas veces ayuda y otras no, pero por lo menos parece que escribirlo es el primer paso para enfrentarse a ello.

      Besos.

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  11. Hola!! algo que siempre me gusta es que no haya tanto drama y veo que toca temas muy importantes y yo también creo que si tuviera la oportunidad de expresar todo lo haría escribiendo, no se si algo parecido a esto porque aún no he leído como es. Lo apunto.

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    1. A mí me hacía falta una lectura así, sin mucho drama. Es como un respiro a tanta desgracia que hay alrededor.

      Besos.

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  12. Yo no veo imposible mentirnos a nosotros mismos Julio David porque a veces ni siquiera nos damos cuenta de que lo estamos haciendo, tan necesitados como estamos de otra realidad.

    Va un beso.

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Me interesa lo que piensas.