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Ilustración de @9Jedit. Instagram
Somos insignificantes. Hay ahí fuera una cantidad infinita de cosas que no conocemos y aun así hablamos como si entendiéramos cual es nuestra misión aquí.
Hablamos, opinamos, juzgamos, aleccionamos como si nuestra opinión fuera la verdad absoluta e ignoramos que nada cambiaría si desapareciéramos en este instante.
Hay tantos mundos de los que no tenemos ni idea que nuestras limitaciones nos hacen creer que no hay nada más para que no entremos en pánico.
Hemos demostrado hasta el cansancio que no estamos preparados para asumir que no somos únicos, ni mejores. Cada día confirmamos con nuestros actos que cuanto más tenemos a nuestro alcance para conocer nuevos mundos, más nos encerramos en el que hemos creado para mostrar a los demás, aunque no es realmente en el que vivimos.
Ojalá algún día dejemos de mirar nuestro ombligo y al alzar la vista descubramos lo que siempre ha estado ahí, un espacio infinito lleno de mundos tan humildes y frágiles como el nuestro.
Mi Otra Yo
Si , no
ResponderEliminarsomos
nada, y
en ropa
interior,
menos .
Pues sí Orlando, pues sí.
EliminarBesos.
Me niego en rotundo a creer que nuestro mundo es el único mundo, eso sería dramático y digno de suicidio.
ResponderEliminarQué desperdicio de espacio si fuéramos los únicos que ocupamos este lugar diminuto.
EliminarBesos.
Más mundos puede que sí. Habitados por seres tan aborrecibles como nosotros, seguro que no.
ResponderEliminarQuizás esos otros seres piensan lo mismo de ellos.
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No creo que seamos insignificantes , cada uno tenemos nuestro lugar en este mundo, eso si, que no estamos solos es evidente , hay mundos fuera de nuestra galaxia , al igual que creo que los hay paralelos al nuestro , pero nuestra mente no la tenemos lo suficientemente desarrollada para darnos cuenta y percibilos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo creo que a gran escala no somos nada, sobre todo como individuos. Somos más pequeños que una gota de agua en un océano. Aunque por ejemplo una simple piedra que produce una onda sobre el agua tiene un efecto incalculable.
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Jo, es verdad, nos encanta opinar y dar lecciones... Mi suegra (una señora de pueblo de 96 años), dice una verdad como un templo: "Sabe más el tonto en su casa, que el listo en la ajena".
ResponderEliminarPero insignificantes... respecto al mundo, claro que sí, respecto a nuestro mundito, espero que no. ;)
Besos
Todos somos importantes en nuestros «munditos», pero no debemos olvidar precisamente eso, que somos uno más entre muchos.
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Insignificantes y efímeros. El tiempo se nos va rápido y lo gastamos como si nos sobrase. Pero descubrir esa insignificancia y asumirla te puede dar libertad. Que los problemas ya no parezcan tan grandes, que nada importe demasiado... Es el lado positivo que le veo. Besos
ResponderEliminarPero es un lado positivo que la gran mayoría no tiene en cuenta a la hora de afrontar los problemas. Tenemos a nuestro alcance un sin fin de recursos para solucionar problemas y después nos ahogamos en un vaso de agua.
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Sólo sé que no sé nada. Y así es. Un abrazo :)
ResponderEliminarPues ya sabes mucho Mari Carmen.
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Cada cual ve lo que tiene a su alcance. Un beso
ResponderEliminarPero que no veamos otras cosas no quiere decir que no existan.
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Es cierto que en muchos aspectos somos miopes y no alzamos la vista pero eso no es siempre malo, a mi me encanta mirar a las hormigas, no saben nada de nosotros ni del universo pero viven su vida y sus rutinas. A veces pienso que, a otra escala, somos así. De hecho lo que más temo es a las personas trascendentes que ven donde los demás no vemos un futuro de glorias y grandezas en que nuestra pequeña "aldea hobbit" se les queda pequeña.
ResponderEliminarYo también me siento como una hormiga a veces.
EliminarEn ocasiones me veo desde arriba, desde el cielo de mi ciudad, después más arriba, desde donde veo el país, un poco más, y veo el continente... Y así me convierto en un punto perdido entre otros muchos puntos.
Besos.
somos los habitantes de un planeta que gira alrededor de una estrella, que a su vez es una de las muchas que hay dentro de una galaxia, de las cuales a su vez hay muchas.
ResponderEliminarpero incluso sin salir de nuestro planeta tierra, abre mucho la mente leer o ver vídeos sobre otros lejanos países, con culturas muy diferentes.
besos!!
Es que hay tanto ahí fuera que no conocemos...
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Pues sí, porque si dejas de mirar al ombligo y levantas la vista, hay tanto que ver... Me ha encantado tu reflexión, coincido totalmente con ella. Besos :D
ResponderEliminarSería bonito poder mirar esos mundos juntas.
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Linda refelxión abarcadora de lo que a veces somos aunque no nos guste. Saludos.
ResponderEliminarEn nuestra mano está cambiarlo si no nos gusta.
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Ojalá. Y no es difícil descubrir lo que dices: basta con perdernos en los ojos de otra persona, mirando queriendo ver, y más aún si miramos al cielo de noche. Tenemos mucho que aprender y aún más que desaprender.
ResponderEliminarBesos
El primer mundo diferente al nuestro está en las personas que tenemos cerca.
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Esa forma de pensar criticada por tu otra yo es lo que podría llamarse sentido común, quedarse con lo supuesto y no indagar más allá de lo conocido. Suelo pensar que lo que se conoce como realidad apenas es una fracción de la verdadera realidad, extraña y compleja.
ResponderEliminarY hay quienes tratan de ir más allá de lo conocido, con el pensamiento, la imaginación, la búsqueda del conocimiento.
Se puede ser único, en el sentido que tener su propia personalidad, sus propias preferencias.
Besos por dos.
Y ahí está lo extraordinario, que habiendo tantas personas todas son únicas, pero no las únicas.
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Un desafío al que nos enfrentamos diariamente.
ResponderEliminarBesos.
Leí hace algún tiempo un artículo sobre la presión por tener una opinión sobre todo, aunque no se tenga ni pajolera idea sobre el tema. Ya no solo es que la mayor parte de las veces nuestra opinión sobre algo que ignoramos no valga de nada, es que igual cerrando el pico estaríamos mejor.
ResponderEliminarBss
Hubo un tiempo en el que me preocupaba no tener opinión sobre ciertas cosas e intentaba dar una lo menos comprometedora posible. Hasta que me di cuenta de que me preocupaba más todavía decir algo equivocado que no decir nada. Y aquí sigo, preocupada, pero sin opinar si no me apetece 😆
EliminarBesos.