El Sábado falleció la madre de una amiga.
Una amiga reciente. Una amiga de las muchas que me ha traído la maternidad.
La conocí hace tres años, Viernes a Viernes, cuando iba al taller de lactancia con Rodrigo. El tiempo ha hecho que algunas de las madres que nos conocimos entonces compartamos aficiones, intereses, proyectos...
Esta amiga es una persona especial, inteligente, con conocimientos y carrera, que te explique lo que te explique nunca te hace sentir de menos, o ignorante, aunque tú no tengas ni idea del tema.
Todavía no he tenido la oportunidad de hablar con ella, de decirle que lo siento, de intentar reconfortarla con mis palabras. Aunque supongo que en esta situación no habrán palabras que logren consolarla.
Porque en estas situaciones, yo nunca encuentro las palabras.
Quizás rebusco demasiado, quizás sea suficiente con un "lo siento", con un "no encuentro las palabras". ¿O puede ser esta una de esas ocasiones en las que las palabras sobren, en las que sea preferible tener un hombro donde llorar? Pues seguramente sí.
Hace años murió la madre de otra amiga, y aunque pienso muy a menudo en ella y creo que a mi amiga le gustaría saberlo, nunca me atrevo a decírselo porque, como siempre, no encuentro las palabras.
Buff, a mí me pasa lo mismo que a tí!
ResponderEliminarEs tan difícil!
Lo mejor es hacerlo en persona... así no hablarás, bastará con un abrazo.
Besitos!
Tienes razón. Un abrazo es, muchas veces, el mejor de los consuelos.
ResponderEliminarBesos.