Sí, me pasa como a Orlando, sólo deseo que pasen aunque en mi caso siento que el peso del presente es tan grande que me deprimen un poco. Como si no fueran pasajeros. Y siempre lo son. Y también siento como si no pudiera hacer nada por cambiarlos, solo esperar a que terminen. Aunque había un escritor que decía que en estos días había que luchar contra la corriente hasta que al final controlásemos nosotros esa mala tendencia, ese mal día. No sé... Besos
Dicen que tenemos que vivir el presente, hacerlo en el pasado puede provocar depresión y vivir pendiente de un futuro que no conocemos ansiedad. Hay que buscar la manera de «simplemente» vivir, aunque pueda no ser tan sencillo como parece.
Los días malos son inevitables. Recuerdo una frase de un escritor "toda espera se hace corta cuando ha terminado" pero qué largas se hacen las esperas cuando aun no han terminado, algo parecido ocurre con los malos días, pensar que van a terminar no sé si es en realidad un consuelo.
Pues no, normalmente no pasa nada. Como cuando decimos que no se puede estar feliz y alegre todo el rato porque es agotador forzarlo. Pero, qué mal ratos se pasan en esos días de mierda y qué largos se hacen. Un abrazo enorme.
Es cuando te cruzas con el vecino y te dice buenos días y tú contestas que serán para él. Tampoco pasa nada por demostrarlo, salvo por la mirada de besugo del vecino.
No puede ser tan de mierda ese día como para no poder sacar algo bueno. Tal vez una determinación, una decisión demorada, un cambio de rumbo, un golpe de timón. Y si sigue siendo de mierda total, aguantar estoico hasta el final que ahí saldremos fortalecidos y olorosos
incluso las épocas buenas pueden tener días de mierda. por ejemplo, yo tengo muy buen recuerdo de 2º de bup por una serie de cosas, pero también durante ese curso hubo algún día feo de tener un rifirrafe con alguien, de sacar una nota más baja de lo que creía... luego recuerdas con nostalgia incluso los días malos. besos!!
Y tanto que no, salvo que te ayudan a valorar más los días que no lo son. Besos cariño :D
ResponderEliminarSi nos sirven para valorar los días buenos por lo menos los habremos aprovechado.
EliminarBesos.
Los dias de mierda nos recuerdan que los buenos momentos hay que saber valorarlos y sobre todo aprovecharlos. Un besote.
ResponderEliminarQuedémonos con eso, que no es poco.
EliminarBesos.
Y sólo piensas
ResponderEliminaren que queden
atrás , es normal.
Y mañana será otro día. Espero que mejor.
EliminarBesos.
Sí, me pasa como a Orlando, sólo deseo que pasen aunque en mi caso siento que el peso del presente es tan grande que me deprimen un poco. Como si no fueran pasajeros. Y siempre lo son. Y también siento como si no pudiera hacer nada por cambiarlos, solo esperar a que terminen. Aunque había un escritor que decía que en estos días había que luchar contra la corriente hasta que al final controlásemos nosotros esa mala tendencia, ese mal día. No sé... Besos
ResponderEliminarDicen que tenemos que vivir el presente, hacerlo en el pasado puede provocar depresión y vivir pendiente de un futuro que no conocemos ansiedad. Hay que buscar la manera de «simplemente» vivir, aunque pueda no ser tan sencillo como parece.
EliminarBesos.
Entonces me
ResponderEliminarpasa como a
ti, Sergio .
Los días malos son inevitables. Recuerdo una frase de un escritor "toda espera se hace corta cuando ha terminado" pero qué largas se hacen las esperas cuando aun no han terminado, algo parecido ocurre con los malos días, pensar que van a terminar no sé si es en realidad un consuelo.
ResponderEliminarMuy buena esa frase Joaquín.
EliminarCreo que si durante un mal día puedes llegar a pensar que va a terminar ya tienes el primer paso dado.
Besos.
Pues no, normalmente no pasa nada. Como cuando decimos que no se puede estar feliz y alegre todo el rato porque es agotador forzarlo. Pero, qué mal ratos se pasan en esos días de mierda y qué largos se hacen.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.
Sí, esos días suelen tener 48 horas que además pasan demasiado despacio.
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Es cuando te cruzas con el vecino y te dice buenos días y tú contestas que serán para él. Tampoco pasa nada por demostrarlo, salvo por la mirada de besugo del vecino.
ResponderEliminarNo pasa nada si se hace con respeto. Seguro que si el vecino está en uno de sus buenos días nos entenderá, y si no lo está pues ya seremos dos ;-)
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No puede ser tan de mierda ese día como para no poder sacar algo bueno. Tal vez una determinación, una decisión demorada, un cambio de rumbo, un golpe de timón. Y si sigue siendo de mierda total, aguantar estoico hasta el final que ahí saldremos fortalecidos y olorosos
ResponderEliminarSiempre hay algo bueno que podamos encontrar Etienne, el problema podemos ser nosotros, que no lo vemos.
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incluso las épocas buenas pueden tener días de mierda. por ejemplo, yo tengo muy buen recuerdo de 2º de bup por una serie de cosas, pero también durante ese curso hubo algún día feo de tener un rifirrafe con alguien, de sacar una nota más baja de lo que creía... luego recuerdas con nostalgia incluso los días malos.
ResponderEliminarbesos!!
Y una vez pasados no parecen tan malos ¿verdad?
EliminarBesos.
¡Yo firmaría! Eso sí, hay que incluir celebración y día de fiesta en el trabajo.
ResponderEliminarBesos.
También puedo haberlos, tu otra yo tiene razón.
ResponderEliminarA veces con consecuencias persistentes.
Besos por dos.
A veces son un trámite necesario por el que tenemos que pasar.
EliminarBesos de las dos.
Los hay, pero también los buenos y eso es lo que no debemos olvidar.
ResponderEliminarBesos.
De los días malos hay que aprender.
EliminarBesos.
Bueno, pasar sí pasa, pero haberlos, los hay.
ResponderEliminarBesos
Que lo que pase nos sirva para aprender, así no habrá sido en vano.
EliminarBesos.
Que se incline la balanza hacia los días buenos... por favor.
ResponderEliminarBesos.
Pues si nos dejan elegir, sí, mejor días buenos.
EliminarBesos.